Según los autores del libro de «Homo Zappiens», Wim Veen y Jan-Paul van Staalduinen hablan del posible futuro de la universidades como corporaciones abiertas e interrelacionadass con otros elementos en red:

El Homo Zappiens y su cultura red global y actuación tendrán su influencia en las instituciones de educación superior. Las instituciones de educación superior evolucionarán hacia instituciones que funcionarán como hubs interconectados y redes de conocimiento, dando servicio a los estudiantes que trabajan en comunidades fluidas de investigación o aprendizaje sobre temas de su interés. Las instituciones de educación superior ofrecerán oportunidades flexibles para el aprendizaje individualizado. Hasta donde estén interesados en programas iniciales, los estudiantes se comprometerán con configuraciones de aprendizaje específicas que les darán créditos estandarizados para diplomas altamente especializados. Habrá que viajar menos a medida que se pueda obtener el aprendizaje en una mezcla de actividades off y online. La tecnología ayudará a reducir la escasez de presencia que aún está limitando nuestras posibilidades para representarnos virtualmente a nosotros mismos en la actualidad. Los hologramas tridimensionales darán la posibilidad de viajar virtualmente sin tener que desplazarse físicamente. La flexibilidad en oportunidades de aprendizaje generará un enfoque distinto para el uso del contenido. El contenido estará accesible principalmente en centros open source y el software proporcionará posibilidades fáciles de encontrar rápida y adecuadamente lo que estemos buscando. El contenido será generado en gran medida por el usuario, investigadores, profesores y estudiantes del mismo modo contribuirán al cuerpo de conocimiento. Sistemas de evaluación por pares asegurarán calidad, reduciendo la influencia de empresas editoriales. Una consecuencia es que los profesores combinarán sus actividades presenciales con otras de presencia virtual para la enseñanza y debate con estudiantes. El aprendizaje permanente se convertirá en una parte integral de la vida laboral de los individuos, igual que las redes continuarán existiendo entre la industria y la educación superior. En la medida en que estén interesadas, las universidades participaran en laboratorios de investigación virtual en los que colaborarán investigadores de distintas instituciones. Sus resultados alimentarán la colaboración con la industria, en donde los antiguos alumnos continuarán siendo parte de las redes académicas. Esta visión podría verse como un escenario que no es totalmente real. Sin embargo, hay fuertes desarrollos tales como la globalización, comunidades virtuales que comparten conocimiento y especialización entre instituciones científicas a nivel global, apuntando hacia estructuras que hará de cualquier universidad que no participe en este progreso mundial. una escuela local o regional aislada.

Las universidades serán como «galerías de aprendizaje» y «estudios de investigación virtual», accesibles para cualquiera desde cualquier parte y apreciadas por los estudiantes de acuerdo a su reputación científica. Los estudiantes se apuntarán y trabajarán dentro de comunidades virtuales o irán a otra parte, construyendo así su profesionalismo, en muchos casos en íntima colaboración con la industria. La educación superior llegará a ser una red de aprendizaje extensa, fluida, de universidades en la que las personas forman parte de comunidades constantemente cambiantes asistiendo y dejando distintas universidades para cursos individuales. Seguir esos cursos no significa estar leyendo un libro online o ver algún video en streaming, sino ofrecerse voluntariamente para proyectos en una comunidad de aprendizaje. Esos proyectos giran en torno a a la resolución de un problema específico a través de un debate o de la escritura de un artículo científico. ¡Cada proyecto tiene un producto final! Esto significa que cambiará el enfoque pedagógico. El aprendizaje futuro se referirá al conocimiento exteriorizado de los participantes cada uno con su parte, y construyendo nuevo conocimiento a través de la comunicación.
Cada vez más, la educación superior tendrá el centro de atención en la resolución de problemas (prácticos) en empresas y otras organizaciones, haciendo que éstas sean nodos de la red de aprendizaje mayor. Finalmente, habrá una convergencia de aprendizaje, significando que la gente hará la mayor parte de su aprendizaje en el trabajo y en el contexto de su trabajo. El futuro de la educación superior es un futuro en el que el aprendizaje no se podrá separar de la práctica profesional: ni siquiera para las personas que estudian alemán medieval.

Referencia:
Veen, W., & Staalduinen, J.-P. v. (2010). The Homo Zappiens and its Consequences for Learning in Universities. In U.-D. Ehlers & D. Schneckenberg (Eds.), Changing Cultures in Higher Education: Moving Ahead to Future Learning. Berlin: Springer.

About the author

Fernando Santamaría González Soy un investigador y formador en espacios online. Trabajando e investigando en temas de aprendizaje emergente.