Después de haber consultado distintas fuentes, por sindicación o sindicar contenidos quiero decir: capacidad de navegar sin navegador por medio de la suscripción a una página web en concreto y pudiendo estar informado en todo momento de cuando se actualiza la página sin necesidad de recibir los clásicos mails que avisan de la actualización.

El término sindicación, y sus sinónimos, son propios de la blogosfera, y tal como nos dicen Antonio Cambronero y A. Fumero, la sindicación es la tecnología que más se ha expandido entre los lectores de bitácoras. La utilidad fundamental que reporta al usuario es la de actualizar automáticamente el contenido de los blogs más visitados sin que sea necesario recordar cada una de las URL.

Ahora bien, para poder sindicar una web es necesario que ésta permita distribuir su contenido a través de uno o más formatos de sindicación o sindicadores de contenido (por ejemplo RSS, RDF, y Atom, que son lenguajes basados en XML y diseñados para distribuir contenidos). Para que un sindicador de contenido pueda acceder a una página, ésta de tener un feed o canal de alimentación. A partir de aquí, con aplicaciones llamadas agregadores de contenido, el usuario recibirá actualizaciones en su ordenador sin necesidad de ir a la página en cuestión. Una página que sea susceptible de sindicar se reconoce por unos iconos (XML, RDF, RSS, Atom), como nos cuenta y que podemos observarlos en el gráfico que hemos puesto.

XML y XHTML


Para que el contenido de una página sea “entendido” por otra página, se necesita un “idioma” común (ver “El botón naranja: Sindicación XML, RDF, RSS y Atom y ¿Qué es RSS —y XML, RDF, Atom,…?”. No todos los navegadores están escritos con el mismo lenguaje. Es decir, para que una página pueda compartir su contenido con otras, es necesario leerlas con un lector de noticias (más adelante me referiré a ellos) siempre y cuando aquella permita distribuir su contenido mediante algún sistema de sindicación. Los formatos de sindicación están basados en XML (eXtensible Markup Language) que, en realidad, es un metalenguaje (lenguaje de lenguajes) diseñado para la creación de documentos electrónicos. Algo así como un creador de lenguajes que hace posible la comprensión del usado en cualquier sitio web. Tiene utilidad, básicamente, para compartir información entre sitios web que actualicen constantemente su contenido (Barrera Cano, R. “La mejor manera de leer blogs”, en PCactual, 178, pp. 138-143, 2005)
El XML más usado actualmente es el XHTML (un documento HTML adaptado a la estructura XML).
No todos los navegadores son capaces de leer textos XML, por lo que para hacerlo, hay que acudir a aplicaciones específicas, que veremos más adelante.

Feeds


Los documentos electrónicos que los lectores de noticias convierten en textos inteligibles se llaman feeds (en inglés: suministro de datos a un dispositivo), canales de información o distribuidores de contenido. Los feeds contienen un resumen de lo publicado en la web de origen (“¿Qué es un feed o canal?”.
Los feeds están escritos en XML, y pueden contener tipos de información muy variada: noticias de prensa, mensajes de correo electrónico, canciones, etc. Hay distintos formatos de feeds, pero los más usados son RDF, RSS y Atom. En realidad, RDF es una versión de RSS, aunque vale la pena referirse a él por separado.
La principal ventaja de usar feeds consiste en que es mucho más fácil crear un feed RSS que una página web, sobre todo para la recopilación del contenido.
El paso siguiente a tener un “idioma común” (XML) a todas las páginas que interesan a un usuario particular es ¿cómo se hace llegar la información al usuario.
La información llega al usuario a través de un lector, sindicador o agregador de feeds (de los que hablaré más adelante), que es, simplemente una aplicación, bien local, bien basada en web, que interpreta cierto tipo de archivos tales como RDF, RSS o Atom. Veamos cada uno de los conceptos.
RDF (Resource Description Framework) vio la luz gracias a W3C (World Wide Web Consortium), la organización que se encarga de crear, unificar y homologar los distintos estándares con los que funciona Internet.
RDF es la tecnología que permitió la creación de RSS y Atom, que son los distribuidores de contenidos on-line más usados en la actualidad. Como decía, RDF es la versión 1.0 de RSS, de la que luego hablaré. Es un formato universal que posibilita el intercambio de información en la web: con un sencillo modelo relacional es posible estructurar conjuntos de datos para exportarlos y compartirlos desde distintas plataformas. Los archivos RDF están escritos con XML y tienen extensión ‘.rdf”

RSS es otro sublenguaje de XML. Un archivo RSS es un simple documento de texto constituido por cierto tipo de etiquetas, análogas a las que se usan en HTML. RSS tiene distintas versiones. Las primeras fueron RSS 0.90 y 0.91, ambas desarrolladas por Nestcape. La 1.0, también conocida como RDF, fue liberada en marzo de 1999 y la 0.91, liberada en julio del mismo año. Ésta incorpora mejoras al formato llamado scriptingNews, que fue creado por UserLand.
Posteriormente se desarrollaron las versiones 1.0 (que fue propuesta en agosto del 2000 por RSS-DEV Working Group) y la 2.0 (creada en 2002) por UserLand. Éstas dos versiones no son totalmente compatibles entre sí. La versión 1.0 no es otra cosa que RDF, de la que he hablado antes.
RSS es uno de los formatos más antiguos para compartir información y una forma universal para vincular el contenido. Es también una de las herramientas con más aceptación para gestionar bitácoras. A RSS se le han dado varios significados: Rich Site Summary (RSS 0.91), RDF Site Summary (versiones RSS 0.9 y 1.0,) Site Summary (RSS 0.9 y 1.0), pero el más actual es Really Simple Sindication, que corresponde a la versión 2.0 y se etiqueta como RSS 2.0 o RSS2. La extensión de estos archivos puede ser ‘.xml’, ‘.rdf’, ‘.rss’, incluso ‘.php’ o ‘js’. Lo que importa es que puedan ser leídos por algún lector lector de feeds.

Atom es la herramienta para distribuir contenidos tal vez más utilizada a pesar de que aún está en desarrollo. Es también un sublenguaje de XML, pero no es una versión de RSS. Fue promovida por Blogger (servicio de Google para la creación de blogs). Atom es superior a RSS en el sentido de que puede integrar más información. La versión que se usa en este momento es la 1.0, publicada en julio de 2005 y que nos da información de ella Pedro Palazón, traduciendo alguna de su documentación al español .

Aunque mucho menos usada tenemos la tecnología FeedBurner, que permite crear formatos estándar y agrupar los existentes (Barrera Cano, F. “La mejor manera de leer blogs”, en PC Actual, 178, pp. 138-143, 2005) y que en este mes ha inaugurado un servicio para añadir publicidad a los feeds.

Programas y lectores webs de noticias


Tal como decía anteriormente, los lectores web de noticias, lectores RSS o agregadores de noticias son programas que permiten al usuario tener sus bitácoras preferidas actualizadas; recogen las actualizaciones de aquellas páginas web que el usuario haya sindicado a través de los feeds respectivos. Las actualizaciones pueden ser simplemente un titular o un resumen, incluso el texto completo, pudiendo tener también otro tipo de archivos de imagen, audio o vídeo.
Hay dos tipos de lectores: los que funcionan en base web (pueden leerse desde cualquier ordenador sin necesidad de ningún software especial) y los que han de ser instalados. En realidad hay aún otro tipo de aplicaciones, que sin ser propiamente lectores, desempeñan esa función.
En Consumer hay una tabla diferenciando los dos tipos, aparte de una animación que puede aclarar como funciona la tecnología RSS.

Del primer tipo, por lo general gratuitos, los más conocidos son Feedness y Bloglines, Rojo, Pluck, Rocketinfo, Kinja y Fyuze.

Entre los lectores de escritorio destaco FeedDemon, perfectamente descrito por Barrera en el artículo antes citado. Este lector necesita licencia, vamos que es de pago. Destaca su sencilla interfaz y el alto nivel de personalización., así como la integración de un receptor de postcasts, integración de búsqueda con aplicaciones tales como Feedster, del.icio.us o Flickr, alertas que indican la actualización de palabras clave pre-seleccionadas. También incluye una selección de canales pre-categorizados. Así mismo, FeedDemon funciona como navegador tradicional.
Barrera también hace referencia a Opera, un navegador noruego que permite suscribirse a canales de noticias y leerlas y a Mozilla Thunderbird, que incorpora marcadores dinámicos, de modo que los feeds se integran en la bandeja de entrada de Microsoft Outlook, como si fuera un mensaje tradicional.
Ya para terminar, me parece útil referirme de nuevo al artículo de Barrera, en que nos dice como la tecnología asociada a la sindicación puede usarse para otras tareas. Entre otras, suscribirse a actualizaciones en las búsquedas efectuadas con MSN Search; seguir el envío de paquetes a través de UPS , US Postal Service o FEDEC; localizar fotografías, por ejemplo a través de Flickr que permite acceder a las de usuarios o grupos; recibir alertas sobre virus, como las de Alerta-Antivirus o Zona Virus. También es posible compartir podcasts, acceder a los mensajes de correo electrónico a los usuarios de Gmail; a información de ciertos periódicos como El País, ABC, 20 minutos o El Mundo sobre la sección que interesa al usuario; conocer los hábitos de navegación o las visitas a un sitio (un ejemplo es compareblogs.com [http:/compareblogs.com]); recopilar y compartir los enlaces de un usuario, clasificados por contenido en del.icio.us.

Algún detalle a tener en cuenta


Para terminar, y por si fuese poca sopa de términos, quiero referirme a un “error” simbólico (para que los rigurosos no se enfaden conmigo) que se cita en el artículo “El botón naranja: Sindicación XML, RDF, RSS y Atom” que, por otra parte, hace una estupenda exposición de los conceptos que he tratado. Se trata de incluir al lenguaje XML como botón para sindicar, es decir, ponerlo como “el famoso botón naranjo”. Ciertamente, y para ser estrictos, debemos ver XML como la tecnología utilizada para generar el RSS, aunque lo importante sea poder sindicarse.
Otra complicación es debida a que hay ciertos sitios susceptibles de sindicarse, pero que no muestran el “botón naranjo”. En estos casos, suele aparecer en texto en alguna parte del menú o para comprobar si realmente podemos sindicar, hay que ver, simplemente, el código fuente, y averiguar si en la página dentro de la etiquetas … (código de cabecera en página web) existe el código como este (sin llaves de abertura y cierre por problemas):

link rel="alternate" type="application/atom+xml" title="Atom" href="http://dominio/atom.xml"
link rel="alternate" type="application/rss+xml" title="RSS 1.0" href="http://dominio/index.rdf"
link rel="alternate" type="application/rss+xml" title="RSS 2.0" href="http://dominio/rss.xml"
Y que es quien dice al lector RSS donde está archivo. Afortunadamente, la “inteligencia” del lector RSS hace este trabajo por nosotros cuando le indicamos que URL ha de sindicar.

Con mucho futuro


Parece ser que se expande como la polvora la sindicación y que tiene un futuro bastante prometedor, ya que usa unos lenguajes estándares, apunta hacia conceptos como la web semántica y cada vez más servicios lo están incluyendo en sus páginas, cuando en un principio era territorio sólo de bloggers.
Se estan investigando en lectores de feeds más inteligentes, que perciban del usuario cuales son los más usados, los más leidos, etc, para crear un lector a medida. Esto es importante sobre todo si lees muchos en un día y se necesita cribar o seleccionar la información.

En fin, que vamos teniendo tecnologías para casi todo. Espero que sea bien digerida esta sopa de hoy.

About the author

Fernando Santamaría González Soy un investigador y formador en espacios online. Trabajando e investigando en temas de aprendizaje emergente.